Página tras página: Reseña: Almas gemelas 1, El beso de un ángel de Elizabeth Chandler

Título: El beso de un ángel
Título original: Kissed by an angel
Autora: Elizabeth Chandler
Editorial: Planeta
Páginas: 1-201
Saga: Almas gemelas (1/3 4)
Encuadernación: Rústica con solapas
Fecha de publicación: 2011
ISBN: 9788408102106
PVP: 17,95

Antes de morir, Tristan le prometió a Ivy que la protegería y que la querría para siempre. El amor verdadero nunca muere.

Ivy es nueva en el instituto de Stonehill, una localidad cercana a Nueva York a la que acaba de mudarse con su hermano y su madre. Es una chica responsable, tímida, buena estudiante y un poco solitaria que siempre ha creído en los ángeles, que considera sus mejores y más fieles aliados. Pronto hace un pequeño círculo de amigas que la ayudan a integrarse a su nueva vida y al instituto.

Tristan es el capitán del equipo de natación. Es un chico inteligente, valiente y uno de los más populares del instituto, aquel por el que suspira la mayoría de las chicas. Cuando Ivy y Tristan se conocen no pueden evitar sentir que están hechos el uno para el otro, son almas gemelas, y se convierten en la pareja perfecta.

Tristan es un chico de instituto por el que suspiran todas las chicas. En cambio, él nada más puede fijarse en una: Ivy. Ella, una chica corriente que no quiere creer que, el chico guay y musculoso va detrás de ella. En cambio, ella sí que cree en ángeles. Tristan sabe que están echos el uno para el otro, que son almas gemelas. Aunque, él se conforma sólo con tenerla cerca. Pero, Ivy no hace más que huir de él. Para Tristan, es un reto difícil, pero no imposible. Para ello, Tristan es capaz de trabajar como camarero en la boda de Maggie, madre de Ivy; cuidar de Ella; gata de Ivy o incluso enseñar a nadar a Ivy, que desde pequeña siempre ha odiado el agua por un terrible motivo. Pero, gracias a esto y por algunos encuentros, Ivy caerá poco a poco entre los abrazos y besos de el guapo Tristan y será entonces cuando se prometan el amor eterno. Pero cuando todo va bien, siempre hay algo que lo estropea. Y, este caso no iba a ser una excepción. La noche de una cena romántica, se convirtió en la peor noche de todas. No llegaron a la cena, se pasaron el tiempo en el asiento de atrás del coche de Tristan. Ahí fue donde ambos se dijeron por una vez, las palabras te quiero. Un ciervo. Tristan. Ivy. Cristales esparcidos. Hospital. Ivy puede recuperarse de las heridas pero, no puede recuperarse de no poder ver nunca más a Tristan. Lo que Ivy no sabe es que Tristan está más cerca de lo que ella cree. Él es un ángel. Un ángel que debe completar su misión, una misión de la que no tiene si quiera idea de cual puede ser.

-¡Frena! -gritó Ivy.
-Estoy...
-¡Frena! ¿Por qué no frenas? -suplicó-. ¡Tristan, frena!
El parabrisas estalló en mil pedazos.
Durante los días siguientes, lo único que Ivy pudo recordar fue la lluvia de cristales.

En las primeras páginas, nos encontramos en los momentos anteriores al accidente. En la segunda página, sabemos que Tristan muere aunque, eso también se puede apreciar en la sinopsis. En el título del libro, ya observamos un spolier: Tristan se convierte en ángel. Sobre los personajes, hay poco que decir. A media que vamos leyendo encontramos más y más personajes. Sobre Tristan, un joven nadador con el que sueña toda chica de instituto: guapo y popular. Me ha enamorado y, me da mucha pena que muera, preferiría que muriese Ivy. Ivy, nuestra querida protagonista... ¡la odio! Me ha caída verdaderamente mal... Sobre su obsesión con los ángeles, me hartaba, hasta que conseguimos saber el por qué de eso. Además, también encontramos otros personajes secundarios que no pasarán del todo desapercibidos, como: Suzanne y Beth, las dos mejores amigas de Ivy. Beth se pasa el día hablando de historias y, sirve para que Tristan se comunique con Ivy. Suzanne se pasa todo el día hablando de chicos además, está obsesionada con Gregory. Gregory es el hermanastro de Ivy. Es tan misterioso, como atractivo. Pero, juega a algo con Ivy que no me gusta nada. Philip es el hermanito de Ivy y también cree en los ángeles. Por eso puede ver un resplandor que corresponde con Tristan. También encontramos otro personajes que es quien hace el toque divertido a toda la historia: Lacey. Ella es un ángel que lleva dos años intentando cumplir su misión pero que, siempre que está cerca de algo se entretiene con cualquier tontería. Ayuda muchísimo a Tristan y eso, me ha encantado.

La novela tiene un ritmo que no decae, con algunas escenas tan divertidas como otras muy aburridas. Me ha gustado el que se explique como ha llegado Tristan hasta Ivy pero, nos repiten el momento del accidente una y otra, y otra vez.. me lo he llegado a aprender de memoria. Es un libro tan romántico, como triste. Además, es una historia un poco predecible pero aún así, maravillosa. Una novela que te engancha. La historia sucede muy rápido, llega algún momento en el que puedes perderte pero, al final esto se soluciona. Es una novela que, aún así debe de ser leída. Te transmite emociones diferentes en cada página. En resumen, El beso de un ángel es una novela que no te hará separarse de sus páginas. Con muchísimos personajes y diferentes sentimientos. Si eres un románticón/a no puedes dejar de pasar este libro. Te hará reír, llorar y.. enamorar.