Autor: Moruena Estríngana
Editorial: Booket (Planeta)
Páginas: 270
Fecha de publicación: julio de 2018
Encuadernación: Rústica
ISBN: 978-84-08-18683-0
PVP: 7,95€
Un amor imposible... ¿O no?
Jenna, una joven que siempre se ha sentido incomprendida, encuentra un trabajo cuidando de una niña preciosa, hermana de Robert, un joven rubio con unos impactantes ojos dorados, que hará que la joven se sienta abrumada ante su atractivo. Sus manos no pueden evitar dibujarlo, su mente no puede evitar recordarlo a cada instante y sentir cómo las mariposas se anidan en su estómago al verlo. Si ya de por sí todo era complicado por la diferencia de edad, se enreda mucho más cuando descubre que el chico que ocupa todos sus pensamientos, y del que sabe que se ha enamorado, es nada menos que el prometido de su hermana…
Robert ha logrado que los servicios sociales no alejen a su hermana de él. Sin embargo, ahora necesita a alguien que cuide de Nora. La elegida para ello es Jenna. Jenna ha intentado dejar a un lado su vida de la alta sociedad para concentrarse en la pintura. No obstante, le gustan tanto los niños que ha optado conseguir dinero cuidando de ellos. Entre Robert y Jenna surgirán sentimientos que van más allá de la simple relación entre jefe-niñera. No obstante, lo difícil entre ellos no es eso, tampoco la diferencia de edad que parece existir. Lo difícil es que Robert tiene novia, alguien que solo busca lo pretencioso y aborrece la simplicidad. Lo difícil es que ese alguien es, nada más y nada menos, que su hermana.
Moruena Estríngana vuelve a sorprendernos con una nueva entrega de la serie Mi error fue. La historia de Robert y Jenna me ha conquistado de principio a fin. Sin duda, Mi error fue enamorarme del novio de mi hermana me ha dejado con ganas de más escritos de esta autora.
La cuarta entrega de la serie Mi error fue narra la historia de Jenna y Robert. En esta ocasión encontramos a un Robert mucho más maduro, mostrando así como un niño puede cambiar la vida a una persona. Encontramos por tanto a un protagonista con los objetivos claro y con la sensatez por bandera. Por otra parte, Jenna es una joven simpática, amable y encantadora. Sin embargo, si hay algo por lo que destaca este personaje femenino es por su sencillez. De nuevo volvemos a saber de personajes como Bianca y Albert, quienes vuelven a enamorarnos por la delicadeza y amor existente entre ellos; y Adair y Laia siguen maravillándonos. En esta ocasión, quienes desaparecen un poco de las amistades son Liam y Elen.
Mi error fue enamorarme del novio de mi hermana se ha convertido en una de las novelas más dulces y delicadas que he leído. Moruena Estríngana ha conseguido fascinarme de nuevo y no sólo por su pluma ágil, sencilla y rápida, sino por crear una historia conmovedora. La rapidez con la que el lector empatiza con los personajes, la realidad de la situación y la capacidad de transportar el sufrimiento hacen de esta entrega un libro único. El ritmo de la lectura no decae en ningún momento y la autora consigue que el lector no aparta la mirada de sus páginas desde el minuto uno. La narración continúa la estructura de las entregas anteriores: dos partes, primera persona y alternándose capítulos entre Rober y Jenna. Moruena Estríngana crea una bonita historia de amor desde la amistad, sin prisas, pero sin pausa, y dejando al lector con ganas de vivir un romance similar. Como novedad, la autora introduce en esta ocasión la lucha entre el cerebro y el corazón. No obstante, lo más importante de esta cuarta entrega es la moraleja de la historia: hay que conocer a la persona y no dejarnos arrastras por estereotipos.
Mi error fue enamorarme del novio de mi hermana se ha convertido en una de las novelas más dulces y delicadas que he leído. Moruena Estríngana ha conseguido fascinarme de nuevo y no sólo por su pluma ágil, sencilla y rápida, sino por crear una historia conmovedora. La rapidez con la que el lector empatiza con los personajes, la realidad de la situación y la capacidad de transportar el sufrimiento hacen de esta entrega un libro único. El ritmo de la lectura no decae en ningún momento y la autora consigue que el lector no aparta la mirada de sus páginas desde el minuto uno. La narración continúa la estructura de las entregas anteriores: dos partes, primera persona y alternándose capítulos entre Rober y Jenna. Moruena Estríngana crea una bonita historia de amor desde la amistad, sin prisas, pero sin pausa, y dejando al lector con ganas de vivir un romance similar. Como novedad, la autora introduce en esta ocasión la lucha entre el cerebro y el corazón. No obstante, lo más importante de esta cuarta entrega es la moraleja de la historia: hay que conocer a la persona y no dejarnos arrastras por estereotipos.
Agradecimientos a Editorial Planeta por el ejemplar.