Reseña: La primera noche de Marc Levy

La esperada continuación de El primer día, de Marc Levy, el autor francés que ha fascinado al mundo. (Reseña El primer día)


Título: La primera noche
Título original: La première nuit
Autor: Marc Levy
Editorial: Editorial Planeta
Número de páginas: 470
ISBN: 
978-84-08-09891-1

•Encuadernación: Rústica con solapas
•Tamaño: 15 x 23 cm
Pvp: 
20,50






¿Dónde empieza el alba? ¿Dónde se acaba el día? ¿Por qué millones de estrellas iluminan la bóveda celeste sin que nosotros podamos ver o conocer los mundos a los que pertenecen? ¿Cómo empezó todo?
Mi nombre es Adrian, soy astrofísico, especializado en las estrellas extrasolares. La humildad más sincera para un científico es aceptar que nada es imposible. Hoy comprendo lo lejos que estaba de esta humildad hasta la noche en que conocí a Keira. Juntos, viajamos hasta los rincones más alejados del planeta para intentar descifrar los misterios del nacimiento del mundo, pero cuando Keira despareció mi mundo se apagó, me encerré en mí mismo, seguro de que nunca volvería a ser feliz. Hoy, un misterioso mensaje me ha devuelto la esperanza...
Tras El primer día, Marc Levy nos vuelve a cautivar con el desenlace de la aventura más arriesgada de todas: la aventura de amar. Más de veinte millones de lectores confirman a Marc Levy como uno de los escritores más leídos y aclamados de nuestros días.


Todo comienza donde finalizó El primer día. Adrian está montado en el avión, en busca de Keira. Pero, de nuevo no está solo. Sir Ashton va a por él. Adrian vive muchas aventuras aunque, no puede dejar de mirar esa foto en la que Keira sonríe y tiene un cicatriz en la frente. Esa cicatriz que confirma lo que piensa, que está viva. Pero tampoco puede dejar de pensar en los últimos momentos vividos a su lado, en ese coche, dándole el último beso.
Adrian no sabe sonde puede estar Keira. Pero, no va a volver a su ciudad sin ella, de eso está seguro. Decide ir al monasterio, ese lugar que les dio cobijo y donde durmieron juntos antes de que sucediera la tragedia. Pero, allí no está. Nadie quiere saber nada de ellos. Todos suponen que no fue un accidente y, están en lo cierto. Un monje, a altas horas de la noche, le dice que debe ir al monasterio de Garther. Al decir esto, le indica que deje su todoterreno y que vaya en autobús y que además, se ponga las ropas que hay en un sobre ya que esa región es muy pobre.
Adrian hace todo lo que le indica. Abandona su todoterreno y viste con la ropa que le dejó el moje. Y va hasta llegar a una tribu nómada. Aunque no hablaba su idioma, le daban de cenar y, se reía mucho con una niña que tenía una mejillas muy rosadas. Una noche, un hombre de la tribu le llevó a un río en el que se bañaban varios monjes. Y a lo lejos, se veía el monasterio de Garther. Adrian buscó a Keira por todos lados pero, fue en vano. 
Esperó a que todos los monjes terminaran de bañarse y los siguió. Vio como la puerta principal se cerraba y como la puerta trasera se abría. De allí salieron dos monjes, uno con capucha. Se fueron al mismo sitio que los anteriores. El moje se quitó la capucha y pasó lo impensable.
Tu cuerpo, iluminado por el claro de luna, es como una aparición, te habría reconocido entre otras mil. Estás aquí, a tan solo unos metros, pero ¿cómo acercarme a ti? ¿Cómo presentarme ante ti en el estado en el que me encuentro sin asustarte, sin que grites y des la alerta? 


Cuando Keira se va, Adrian consigue dormirse pero, escucha unos pasos. Prefiere cerrar los ojos para no pensar en que es un animal salvaje. Son unos monjes, que le da cobijo y comida. Entonces, mientras está en una misa, la ve. Es ella, es Keira. No era un sueño, era verdad.
Pero Keira pasa de él hasta que, consigue hablarle sin que los demás se den cuenta. Quedan por la noche, y deciden escapar juntos pero Keira ha echo una promesa, debe estar dieciocho meses allí. Adrian la consigue convencer y cuando salen, hace mucho frío. Caminan hasta que no pueden más y entonces Adrian descubre que han estado dando vueltas, entonces Keira se va hacia la puerta principal del monasterio y la ve entrar.
Pero lo que Adrian no sabes es que no pudo llegar a China, el avión dio media vuelta ya que por poco muere y que actualmente está en la cama de un hospital. Ha estado en coma y Keira no ha echo la promesa de estar dieciocho meses con los monjes, lo que sucede es que debe estar dieciocho meses en la cárcel.


Pues, comencemos indagando en nuestros protagonistas:
Keira: Es una arqueóloga que sueña con volver al Valle del Omo. No sabe transmitir sus sentimientos y, aunque cuando lo hace, transmite mucho. Quiere encontrar a la primera mujer que hubo en la Tierra y, ya sabe como la llamará, Eva. Lleva tres meses y medio en la cárcel de Gaether, que antiguamente fue un monasterio. Pero, lo que más desea es volver a ver a Adrian, que desde que sufrieron el accidente no ha vuelto a tener noticias suya.
Adrian: Es un astrofísico que sueña con saber cual fue la primera estrella. Creía que nunca iba a volver a encontrar el amor hasta que volvió a aparecer en su vida ella, Keira. Ahora lo único en lo que piensa es en volver a verla, en todos los momentos que han compartido juntos, todo le recuerda a ella y siempre, como una pesadilla, aparece el momento del accidente.

De nuevo, como en El primer día queremos saber que es lo que sucederá si se unen todos esos fragmentos y si, Adrian conseguirá encontrar a Keira. En La primera noche, obtenemos todas las respuestas a nuestras preguntas.
Esta vez, no sabemos nada sobre como se siente Keira ya que, el único narrador protagonista es Adrian. Aunque, seguimos con los momentos de Ivory y Sir Ashton.
Al principio, nos hacen un resumen de todo lo leído en El primer día. Cosa que se agradece sobretodo para recordar algunos momentos que son importantes en La primera noche.
Este libro me ha resultado muy fácil de leer, como el primero. Con mucho más misterio y menos amor. Con cada página que leemos nos apetece leer más. Otra vez me he reído con algunos capítulos del libro y otra vez me he sentido triste con muchos otros. 
 Conclusión:
De nuevo, un libro muy ameno y con toques de humor. Un libro que te resultará muy fácil y rápido de leer. Con ese toque de misterio y de amor que nos hará devorar sus páginas como en El primer día.

[Agradecimientos a Editorial Planeta por el ejemplar]